La afición del Junior bien podría decir que hoy el equipo tocó fondo ante Patriotas, al empatar sin goles como local, en un partido desprovisto de todo y que solo se podría definir como mediocre. 

Los minutos previos a las acciones estuvieron marcados por el homenaje póstumo al reconocido cantante vallenato Martín Elías, a quien Junior dedicó un mensaje especial con una pancarta, además de un minuto de silencio y una cinta negra en sus camisetas. 

El marco luctuoso que rodeaba la atmósfera previa al partido por poco termina de ser rematada con una tristeza en el primer minuto, por cuenta de una pifia defensiva de Alexis Pérez, quien dejó sin marca a Uvaldo Luna para que el atacante de la visita quemara las manos de Sebastián Viera con un cañonazo de derecha, que el portero logró despejar. 

La verdad sea dicha que el partido fue desde ese momento, y por más de media hora, una oda al sueño. Ninguno de los dos equipos hicieron la gran cosa para tratar de desequilibrar, más que correr detrás del balón y probar con tiros de media distancia. 

Fue un partido que reflejó el contexto de los dos equipos en la tabla, los coleros. De un lado, la visita que trataba de hacer algo para avanzar del puesto 11 y de un Junior que se hundía en la última casilla del todos contra todos. 

No fue que hasta los 33 minutos de partido que los rojiblancos dieron señas de una verdadera jugada de peligro. En una pelota filtrada al área, el atacante nariñense Édinson Toloza se las arregló para deshacerse de la marca de un defensor y sacar un tiro que logró ser bien contenido por el meta Álvaro Villete. 

Fue el segundo tiro al arco del conjunto de casa, que a los 16 minutos había tenido la aproximación de un prácticamente inédito Yony González, una de las variantes incluidas por Julio Comesaña para el partido, al igual que Faber Cañaveral, de discreto primer tiempo, y Leonardo Pico, de aceptable actuación. 

Antes de acabar la primera mitad, un distante tiro libre, de más de 35 metros, ejecutado por Sebastián Viera fue el único atractivo en las acciones antes de irse a descanso. Pero el tiro del charrúa se fue por un costado, abierto de la meta de Patriotas. 

Así, en medio de una ola de sueño que inundó las tribunas, el central del partido indicó la finalización de las acciones, para que Junior se fuera a las duchas para ver si con un poco de agua helada y las indicaciones de Julio Comesaña, se despertaban los jugadores en procura de ir por los tres puntos.  

El segundo tiempo arrancó con un poco más entusiasmo, Junior quería el protagonismo y adelantó sus líneas para así llevarse la victoria, aún cuando no jugase un buen partido. 

Pero no fue sino hasta los 53 minutos que Roberto Ovelar botó un tanto claro sin portero. El guardameta Villete dio el rebote para que el paraguayo definiera y el tiro terminó rebotando contra la base del poste. 

Más tarde, a los 61 minutos de las acciones Ovelar entró de frente para rematar una pelota centrada desde la derecha por Toloza y mandó la esférica por encima del travesaño, ante la impotente mirada de los pocos aficionados. 

No fue sino hasta los 72 minutos, cuando Julio Comesaña echó reversa a sus modificaciones y sacó del campo a unos impresentables González y Cañaveral, para dar paso a Jarlan Barrera y Jonathan Estrada, que al final poco aportaron al juego. 

En el tiempo de adición, Viera volvió a ejecutar un tiro libre que se fue desviado por el costado del palo derecho del arquero. Una aproximación nada más. 

Con el silbatazo final, terminó un suplicio descorazonador para los hinchas. No poder ganar a Patriotas fue la ofensa más grande en una serie de desazones que le ha brindado el equipo a sus seguidos. 

Una actuación tan mala que bien explicaba su último lugar, pero que gracias al punto lo colocaba en la casilla 17, con 11 puntos. Un resultado que confirmó su mediocridad, pues salió del fondo por obra de un empate en casa y no de una victoria. 

Ahora los rojiblancos, prácticamente eliminados, visitarán al Deportivo Cali a ver si se da alguna seña de mejoría, definitivamente pensando en el segundo semestre y los ajustes que sumará Comesaña.